Sábados de perdici-OH-n!

Llegar a Oh los sabados es un display de sexiness, drogas alcohol y miradas. No me tomen a mal queridas lenchas, yo como mujer joven y fiestosa visito estos antros amenudo, aunque claramente prefiero donde Ana.

Ayer me topé excesiva cantidad de niñas lindas, en vestidos cortos, bailando sexi. Disfruté del maravillosou chou, de todos los cramberrie-vodkas que cupieron en mi sistema, del baño comunal, de la mega torta que wachea el baño comunal, del maripepino de la despedida de soltera del VIP, de bailar en las tarimas, de ver y ser vista. Disfrute de el humarascal, de la calva de DJ Mason, de repellar a mis mejores amigas straight y de tirar veneno cada vez que atravesaba el dancefloor... Una noche en Oh, siempre es exhibicionismo sexy y sudoroso.